¿Cómo prepararse antes de una cirugía estética?
Elige un cirujano certificado y de confianza
Antes de pensar en el día de la cirugía, es crucial que tu procedimiento sea realizado por un cirujano plástico certificado, preferiblemente por una organización reconocida como la Sociedad Americana de Cirujanos Plásticos (ASPS) o su equivalente en tu país.
Consejos:
- Revisa credenciales y experiencia del médico.
- Pide ver fotos del “antes y después” de otros pacientes.
- Lee reseñas y testimonios.
- Asegúrate de que la clínica esté autorizada y equipada.
Realiza una evaluación médica completa
Antes de cualquier cirugía, es indispensable hacerte estudios preoperatorios para comprobar que estás en condiciones óptimas de salud. Dependiendo del procedimiento, podrían solicitarte:
- Análisis de sangre
- Electrocardiograma
- Evaluación cardiovascular
- Pruebas de coagulación
- Exámenes de imagen (como ultrasonido o mamografía)
También es fundamental que informes a tu médico si padeces enfermedades crónicas (como hipertensión, diabetes o asma) o si tomas medicamentos regularmente.
Evita ciertos medicamentos y sustancias
En los días previos a la cirugía, el médico puede indicarte suspender medicamentos anticoagulantes como aspirina, ibuprofeno o suplementos como vitamina E, omega-3 o ginseng, ya que pueden aumentar el riesgo de sangrado.
Además, evita por completo el alcohol, el cigarro y otras sustancias al menos dos semanas antes y después del procedimiento. Fumar, por ejemplo, puede afectar la cicatrización y aumentar el riesgo de complicaciones.
Sigue una dieta balanceada y mantente hidratado
Una buena alimentación fortalece el sistema inmunológico y acelera la recuperación. Algunos consejos incluyen:
- Comer frutas y verduras ricas en vitamina C
- Incluir proteínas magras (pollo, pescado, huevo) para regenerar tejidos
- Beber suficiente agua todos los días
- Evitar comidas muy grasosas o procesadas antes del procedimiento
No comas ni bebas nada al menos 8 horas antes de la cirugía, a menos que tu cirujano indique lo contrario.
Prepara tu hogar para el postoperatorio
Tu recuperación será mucho más cómoda si preparas tu espacio con anticipación. Ten a la mano:
- Ropa cómoda y fácil de poner (de preferencia con botones o cremalleras)
- Almohadas extra para elevar ciertas partes del cuerpo, si es necesario
- Medicamentos recetados por el cirujano
- Compresas frías o calientes, según lo indicado
- Alimentos fáciles de digerir y utensilios a tu alcance
- Ayuda de algún familiar o amigo durante los primeros días
Resuelve todas tus dudas antes de la cirugía
Durante las consultas previas, no tengas miedo de preguntar todo lo que necesites. Algunas preguntas clave pueden ser:
- ¿Cuánto durará la cirugía y qué tipo de anestesia se usará?
- ¿Qué puedo esperar del resultado y cuánto tiempo tomará?
- ¿Cuáles son los riesgos o posibles complicaciones?
- ¿Qué cuidados debo tener después del procedimiento?
- ¿Cuándo puedo volver al trabajo o hacer ejercicio?
Una buena comunicación con tu cirujano te dará tranquilidad y confianza.
Cuida tu estado emocional
Aunque muchas personas se sienten emocionadas por el cambio, es común tener ansiedad o nerviosismo antes de una cirugía estética. Es importante que:
- Tengas expectativas realistas: la cirugía puede mejorar tu apariencia, pero no debe ser vista como una solución a problemas emocionales o de autoestima.
- Hables con personas cercanas para recibir apoyo.
- Te tomes el tiempo para reflexionar si realmente estás tomando la decisión por ti, y no por complacer a otros.
Organiza el transporte y descanso postoperatorio
Después de la cirugía, no podrás manejar ni hacer esfuerzos físicos, por lo que debes:
- Pedir a alguien de confianza que te acompañe y te lleve de regreso a casa.
- Tener al menos unos días de descanso programado en el trabajo o en tus actividades habituales.
- Evitar levantar peso, agacharte o exponerte al sol, según el tipo de cirugía.